Partidos en los que nadie pudo parar a Michael Jordan
Michael Jordan se ha convertido en el ídolo de millones de personas en todas las generaciones recientes por una razón. Su posición financiera también se basaba en el extraordinario talento que mostraba activamente en la cancha de baloncesto. En su corta carrera deportiva, Michael consiguió superar a todos los que hasta entonces se consideraban líderes indiscutibles y restregar en las narices a los que podrían haber cuestionado sus capacidades. Prueba de que Jordan puede enfrentarse a cualquier rival en la pista, cinco partidos clave han demostrado su temple.
1. Oponente – Boston, 20 de abril de 1986
A pesar de una cierta «caída» que marcó el inicio de la carrera de Jordon, consiguió demostrar a posteriori que sólo se trataba de un pequeño resbalón o una casualidad, incluida una desafortunada lesión en la pierna que le obligó a perderse toda una temporada. El equipo sobrevivió a duras penas sin él, logrando colarse en los play-offs con un resultado de 30-52.
El regreso de Michael a la alineación consiguió dar un giro a la situación. En la batalla contra Boston, el jugador de baloncesto logró 49 puntos, que no mejoraron mucho. Sin embargo, en el segundo partido contra su archienemigo, Jordan resucitó y consiguió superar incluso a su predecesor, Elgin Baylor, que llegó a anotar más de 60 puntos en un partido de playoffs. Michael realizó 22 tiros de 41 intentos y 16 tiros libres de 21 posibles. A pesar de la derrota ante los Chicago Bulls, la contribución de Jordan fue inestimable.
2. Rival Detroit, 4 de marzo de 1987
Sin Woolridge, Jordan tuvo total libertad de acción. Eso debería haber facilitado las cosas a los Bulls y haber restregado la nariz a sus rivales. La leyenda del baloncesto podría haber hecho cualquier truco que deseara y salir como ganador final. Pero se le estaba pinchando en cada partido. Sin embargo, contra Detroit, Michael acertó 22 de 39 tiros posibles y 17 de 18 tiros libres. Como resultado, Jordan permitió a su equipo asegurarse el codiciado podio.
3. Rival Atlanta, 16 de abril de 1987
La temporada regular 1986-87 fue una de las mejores de la carrera de Michael. El jugador de baloncesto estaba en llamas y destrozaba todo y a todos a su paso. Ya tenía medio siglo de vida, pero aún debía esforzarse. Así que Jordan venció a sus rivales en Atlanta, incluyendo a Dominic Wilkins. Desgraciadamente, no consiguió la victoria que deseaba, pero sí una nueva línea en el historial de Michael.
4. Rival Cleveland, 28 de marzo de 1990
El rápido «bombardeo» de Michael en la temporada permitió a los Chicago Bulls avanzar con paso firme hacia su objetivo. A pesar de algunos fallos, el equipo consiguió derrotar a sus rivales. En el partido con Cleveland, Jordan consiguió incluso «enterrar» a su rival, teniendo en cuenta la forma en que lo manejó en sus anteriores partidos. Con 68 puntos y 18 rebotes, 6 asistencias y 4 robos, llevó a su club a la victoria.
5. Oponente – Orlando, 16 de enero de 1993
Completando los mejores partidos de Michael Jordan está el partido contra Orlando. A pesar de todos los esfuerzos que permitieron al equipo seguir ganando, y de que a menudo Michael tuvo que tirar literalmente de sus compañeros, «Orlando» no iba a ceder. La situación se complicó por el hecho de que junto a Jordan crecía con confianza Shaquille O’Neal, que también tenía la intención de mostrarse. Orlando ganó la batalla, pero las hazañas de Michael esa noche han pasado a la historia del baloncesto para siempre.