La leyenda del baloncesto Michael Jordan nunca deja de impresionar. Resulta que el atleta tiene talento no sólo para jugar a la pelota, sino también para ser empresario. Ganó seis títulos de liga con los Chicago Bulls. Cuando se hizo cargo del timón de los Charlotte Hornets aún no ha ganado nada. Además, es probable que el equipo abandone los últimos playoffs en la Conferencia Este. Una derrota en 5 de 7 partidos sugiere abiertamente eso.
En caso de que el equipo quede eliminado de la competición, sería la undécima vez que el equipo se pierde los playoffs, con 14 temporadas por delante. Lo curioso es que Jordan es el propietario de una participación mayoritaria en el equipo. Lo adquirió en 2010. Dado el rendimiento del equipo, muchos bromearon sobre el ex atleta. Su olfato empresarial se vio gravemente comprometido por su talento para el baloncesto.
Aunque los Hornets tuvieron un rendimiento inferior, el club demostró ser una buena inversión. En 2006, Jordan se convirtió en accionista minoritario del equipo. En 2010, transfiere 175 millones de dólares por ella. Además, el deportista anunció entonces su intención de pagar decenas de millones de dólares para futuros gastos de funcionamiento.
En febrero de ese año, el equipo ya estaba valorado en unos 1.050 millones de dólares, según la revista Forbes. La cantidad adeudada era de unos 150 millones de dólares. Al mismo tiempo, Michael era dueño de casi el 90% del club Charlotte Hornets. Parecería imposible, pero no cuando se trata de Michael Jordan.
El periodo estuvo marcado por el increíble éxito de Jordan Brand, fruto de la colaboración con el gigante deportivo Nike. En un mes, la fortuna del jugador de baloncesto había ascendido a 1.650 millones de dólares. Esto sitúa a Jordania en el puesto 1477 de la clasificación de las personas más ricas del mundo. Consiguió superar los 90 puestos en 1 año. Si nos limitamos sólo a las personas más ricas de Estados Unidos, Michael se aseguró el puesto 455.
Durante el periodo estudiado, el equipo añadió alrededor de un 35% de valor. Tuvo la suerte de que los clubes, cuyos ingresos eran bastante bajos, ganaran gracias a un flujo creciente de ingresos procedentes de los canales que retransmiten los partidos, así como de las cadenas internacionales. Así es como las franquicias se las arreglan para aumentar significativamente su valor, mientras que ni siquiera alcanzan alturas significativas en la clasificación.
Curiosamente, los Hornets siguen estando en la parte baja de la jerarquía financiera. Sólo los Memphis Grizzlies y los New Orleans Pelicans están por debajo de ellos. Pero hay otra cosa que ha jugado a su favor: el apoyo de los seguidores de Jordan. Desde que Michael cambió el nombre de los Bobcats por el de los Hornets, la afición se ha ampliado enormemente en cuestión de minutos.
Gracias al dominio de Jordan, los partidos del equipo se convirtieron en unos de los más vistos. Sin embargo, cuando se volvió a cambiar el nombre original, el número de aficionados disminuyó. Pero esto no empeoró la situación financiera de Michael. Sigue siendo uno de los deportistas más ricos del mundo.