Jordan se burló con gracia de uno de los mayores gigantes de la NBA
Michael Jordan y Dikembe Mutombo tienen un largo historial de frases brillantes en la cancha de baloncesto. Rivales en el juego y compañeros en la vida, las leyendas de la NBA han demostrado en repetidas ocasiones no sólo rendimiento, sino también un espectáculo entretenido que suscita el afecto genuino del público.
Diversión en la cancha de baloncesto
Muchos aficionados al baloncesto señalan que el periodo de la década de 1990 fue el más brillante de la historia de este deporte. Los partidos se escenificaban, pero la esencia del juego no cambiaba. Los competidores metían el balón en la canasta y mostraban sus proezas y su talento, pero sin olvidar su alegría y su humor humanos.
Hoy en día es raro ver algo así, y a veces los partidos se celebran incluso como un acontecimiento deportivo tradicional, por lo que el público ya no es tan numeroso y «variopinto». Una de las rivalidades más memorables es la de Jordan-Mutombo. Los dos gigantes no desaprovecharon ningún momento para burlarse el uno del otro y provocar numerosas sonrisas entre el público.
Un partido importante y las payasadas de Jordan
El 23 de noviembre de 1991 tuvo lugar el partido entre los Chicago Bulls y los Denver Nuggets. El primero venció al segundo por un margen de 7 puntos, y Jordan anotó 37 de 107. Fue elegido mejor jugador del equipo campeón. Hacia el final del partido, Michael no perdió ni un momento y decidió burlarse del pívot de los Denver Nuggets Dikembe Mutombo.
Antes del partido, los equipos se enfrentaron en el vestuario, donde Dikembe le dijo a Michael que éste nunca había conseguido ejecutar un mate de póster en su presencia en la cancha durante los seis años de rivalidad. Patrang Jung, de los New York Knicks, otra leyenda de los noventa, también estuvo presente.
Jordan no mostró ninguna reacción a la embestida de Mutombo entre bastidores, pero en la cancha, cerca del final del partido, dibujó un poderoso cartel a través de su oponente. Además, Michael terminó su actuación realizando el gesto característico de Dikembe de hacer girar el balón en su dedo mientras miraba a su oponente con un ojo.
Cabe señalar que este gesto se convirtió en un icono de la actuación de Dikembe cuando lo realizó en uno de los partidos más importantes de las semifinales de la Conferencia Este. En aquel momento su equipo jugaba contra los Atlanta Hawks. A menudo, durante las entrevistas, el atleta daba una clase magistral de ejecución de esta técnica.
Jordan demostró su habilidad, que arrebató a su rival 3,5 segundos antes de la bocina en la línea de tiros libres. Este momento no tuvo ninguna repercusión en el resultado del partido, pero aun así Michael montó su propio espectáculo. Sus burlas a atletas con una diferencia de estatura de 20 centímetros (Jordan es más bajo que Mutombo) entusiasmaron al público aquella noche.
La inestimable contribución de Mutombo al baloncesto
Aunque Dikembe nunca consiguió superar a Michael en el número de títulos que ganó, dejó una huella importante en la historia del baloncesto. Es miembro del Salón de la Fama y uno de los mejores jugadores defensivos de la historia de la NBA. Además, ha participado en 8 Juegos de las Estrellas.
Mutombo debutó en la liga en 1991. Desde sus primeros partidos, ya se mostró impresionante en el aspecto defensivo, asegurándose un futuro inigualable en el baloncesto. Esta es una de las razones por las que Michael le destacó y, aunque hizo bromas sobre él, lo hizo con auténtico respeto por el talento del atleta.